Manual de derecho disciplinario de los funcionarios públicos

Abstract

Uno de los sectores de nuestro ordenamiento que ha sufrido cambios más trascendentales después de la aprobación de la Constitución es el de las sanciones administrativas. Sin exagerar, y en contraste con tiempo afortunadamente ya pasados, podemos afirmar que el texto fundamental de 1978 contiene los resortes necesarios para situarnos en vanguardia de los derechos punitivos post-beccarians. En efecto, una vez se proclamó la existencia de un Estado Social de Derecho en que los poderes públicos constituyen, por definición, la base del sistema, se reconoció a los ciudadanos un catálogo de derechos y garantías fundamentales sin comparación a nuestra área cultural y se concretó, de manera exprés, el papel finalista, exclusivo y excluyente que tiene que cumplir la Administración (el servicio a los ciudadanos y la consecución del interés general), no es de extrañar que el universo del campo sancionador administrativo experimentara igualmente un giro, copernicano. En este marco (lo de las sanciones administrativas) se inserta el embrión de este trabajo. A causa, pero, de su desarrollo espectacular y prolijo, tuvimos que seleccionar una área específica, la del régimen disciplinario de los funcionarios públicos.